lunes, 19 de septiembre de 2011

Oktoberfest

Hola, hola, hola. Disculpad el retraso. Como era de esperar, la vida reykjavikense empieza a apoderarse de las horas y a obstaculizar el envío de información a tierras sureñas. A esto sumémosle el hecho de que internet funciona muy lento, y a veces ni eso, en casa. Consecuencia: las llamadas tienen una calidad asquerosa (no impide actualizar el blog, lo sé, pero sí llamar a mis aitatxicos, que sé que están un poquito moscas) y me da una pereza horrible pelearme con Skype/Voipwise.


Anyway, la vida aquí va palante y a toda mecha. El día a día en Von ya es prácticamente hogareño y, desde luego, familiar. Paso la mayoría del tiempo con Linnea, Jonas y Kevan (suecos), aunque con los demás también coincido bastante (últimamente mucho con Juan, un sol y español, @irfrit si queréis conocer otra perspectiva de nuestra vida islandesa). 

La semana pasada tuve clase todos los días porque, además de las habituales, tuvimos una profesora invitada del Reino Unido en la clase de Derecho del Mar y, por lo tanto, todos los días -excepto el viernes- dimos 2 o 3 horas de clase con ella. La verdad es que todos agradecimos, y mucho, su maravillosísimo inglés y, como no, grandioso acento de la reina. Bendita seas Queen Elisabeth. El caso es que pasé más horas que un tonto en la universidad, tanto en clase como en la biblioteca, leyendo, preparando casos, etc. Eso sí, el miércoles (y que no falte) fiesta Erasmus en Hvita Perlan (Perla Blanca) tras una cena Von. Tocó cena sueca de las manos de Linnea y Jonas: albóndigas (abuela, las tuyas nunca tendrán parangón), pure de patata, una salsa típica (con nata líquida, etc. dietetique, que diría la Espe), mermelada de noséqué (sí, también para las albóndigas) y ensalada. 



Con esto de que no estamos en España, a la 1 nos cierran el chiringo, de modo que para la 1.30 estaba durmiendo. El jueves tuve que leerme un caso de Derecho Comunitario, tres horas de clase de Derecho del Mar, meeting con el grupo de Derecho Comunitario (3 islandeses, 1 islandesa y yo; muy simpáticos aunque a veces me miran como las vacas al tren) y vuelta a casa corriendo porque habíamos quedado en Von para ir al Oktoberfest; un festival de tres días (3500kr) que viene a resumirse en una carpa con conciertos/fiesta durante tres noches. Fuimos unos cuantos, los suecos, Hannah, Danny, Linnea, Inga, Sonja, Shishir, otra islandesa, etc. El jueves había conciertos y, en particular uno de ellos, fue estupendo (Of Monsters&Men, escuchad Little Talks; aquí suena a todas horas). 

 
Mis amigos se fueron antes porque "se aburrían"; de modo que me quedé con Lucile y Anouck (las chicas francesas con las que compartí habitación en el Boarding School) que también habían ido por su cuenta. Mi buddy también andaba por ahí. Lo pasé muy bien, la verdad es que son un encanto (y eso que son francesas). Anouck quería irse pronto porque madrugaba el viernes, de modo que me fui con ella para que no tuviera que volverse sola; que, esto es seguro, pero nunca se sabe. 


El viernes, día completito: clase de 2 a 4, a las 5 un Science Trip (presentaciones a empresas que ofrecen las asociaciones de estudiantes de cada una de las escuales de la uni que, en realidad, esconden comida y bebidas gratis y posterior fiesta en algún bar del centro) y a la noche Oktoberfest. Un chico de clase (islandés pero que ha vivido la mayor parte de su vida en Estados Unidos, pelirrojo-pelirrojo y ex-jugador de fútbol de la primera división americana pero que se rompió la pierna y ahora se encuentra aquí haciendo rehabilitación -y, por supuesto, va a demandar (como buen quasiamericano que es) al que le tiró al suelo- y estudiando) se ofreció a acercarnos a la empresa y, como íbamos con tiempo, nos llevó antes al centro comercial (a tres de clase) a pingonear un poco. 


La presentación de la empresa (Logos) duró como 5 minutos (en perfecto islandés); había vino, cerveza, picoteo, etc. y allí estábamos todos, erasmus y locales, cual jubilados, bebiendo y comiendo para tres días. Estaban mis compis de grupo de Derecho Comunitario, Sonja -que también estudia derecho- e hicimos nuevas migas con algún/a local más. 

Sobre las 7 un autobús nos llevo al centro porque había una postfiesta en B5 (ya sabéis, el bar de moda de Islandia que, os aseguro, es una merde); nos dieron una cerveza gratis y enseguida nos fuimos. Katherinaa (la chica del norte de Italia que vive en un apartamento y, gracias a quien, tengo la habitación que tengo) había organizado una cena en su piso con los suecos (además de las otras inquilinas del piso: Anja (Eslovenia) y Seula (Corea) y alguna otra más). Allí nos plantamos (Amanda, Anja y yo; las tres de derecho) y seguimos cobiendo (comiendo y bebiendo) hasta que llego Inga y, ala, al Oktoberfest. A partir de ahí, podéis imaginaos: fiesta, brincos, saltos y, como no, islandeses empujando. Me retiré pronto.

 

Sábado, tras 9o10horas de necesitado sueño, día de relax. Fui con Inga a comprar chuches (50% de descuento los sábados en una cadena de supermercados) y a dar una vuelta en su coche y, después, me fui con Linnea, Hannah, Danny y Bjorg (Noruega) a tomar café. Hemos bautizado los sábados como día de chicas: brunch, lunch, café o lo que sea (Danny cuenta como chica). Vuelta a casa, cenar, preparanos, y aquí se nos plantaron unos cuantos a beber como cosacos. Yo ya tuve suficiente el viernes y, además, la economía no da para todo. Así que, "sober night". Graso error, puesto que el resto se agarró una moña espectacular y acabé de los nervios y yéndome a casa pronto. Di que, no me vino mal, porque pude dormir y, ayer, estar como una reina. 


Ayer, domingo gris, lluvioso, de esos de sofa y tele. Aunque aquí no tenemos tele (bueno, sí, pero no va). Tenía que preparar un speech de 3 min para hoy, de modo que, a trancas y a barrancas, en ello anduve. Mucha charlita en la cocina con Linnea, mucho facebook... Ah, y cena en B5 con Linnea, Jonas y Bjorg. Hamburguesa cerda con patatas (1390kr). 


Hoy, vuelta a la cruda realidad. Speech (un 8), clase, estudiar.

Han organizado un "knitting club" (club de punto) como se hacía en los viejos tiempos por estos lares y hoy a las 8 es la segunda quedada. Pero no sé si iré o no; no me da la vida para tanto y, creo que vamos a hacer un "private knitting club" con Hannah, Linnea, Danny, Bjorg.... El problema es que nos falta alguien que sepa hacer punto. We'll see. 

Ah, se me olvidaba. El miércoles estuve en Ikea (con Inga) y mi cuarto ya no parece el de una abuela (Eg, ya tienes edredón :) y, por supuesto, todos aquellos que queráis visitarme). Y también estuve en la piscina (creo que ya os dije que aquí es deporte nacional). Conclusión: MANOS ARRUGADAS. Mecawen la mar. El agua está caliente, así que, desde el minuto uno, como pasas. Hora y media acordandome de mi aita. Tenía ganas de llorar. El jacuzzi al aire libre mola (uno a 39º y otro a 42º, que quema), la verdad. Y, de hecho, me compré un pase de 11 pases (3300kr), con que, más me vale ir. Mis amigos tienen la teoría de que a ellos no se  les arrugan tanto las manos porque ya han estado varias veces. Creo que es una mentira como un piano y que se me seguirán arrugando y seguiré teniendo ganas de llorar, pero, qué se le va a hacer, when in Rome, do as the Romans do, ¿no?


En cuanto a asuntos administrativo-prácticos, esto parece España. Me compré un abono de autobús para 4 meses hace 20 días exactamente y, todavía no ha llegado. Conclusión: cada vez que me cojo el bus tengo que pagar 350kr (unos 2.25€). Hasta la semana pasada hizo buen tiempo y, consecuentemente, pude ir andando (y volver) a la uni. Sin embargo, se ha empezado a torcer (y creo que va siendo un aviso de la que se nos viene encima) y, cuando llueve, no se puede ir andando (aquí, el paraguas, como que no sirve de mucho). Conclusión: a pagar. Estuve 15min hablando con una por teléfono, las de la estación de autobuses ya me conocen, una alemana tenía mi foto en su abono... Y esto, sin contar que una asignatura no me la van a convalidar y nadie me contesta a los e-mails. Pero bueno, como dije, esto son temas administrativo-prácticos que, no os interesan a nadie. 


Espero no haberos matado con toda esta cantidad de información; es lo que tiene retrasarse en los deberes...

Os mando un beso, un abrazo, un achuchón enorme. Os quiero a todos, 

Alicia.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Rutina Reykjavikense


Bueno, bueno, bueno. Esto ya es otra cosica. Os acordáis de aquello de "creo que tendré dos camas, así que id cogiendo vuestros billetes ya". Pues bien, no tengo dos camas, pero tengo una plaza de toros. King size bed (y por qué será que el King se llevaba la más grande, no?). Una queen en una king.


La casa es una monada. Está en pleno Laugavegur (calle principal), a 20m de Bonus (el super barato) -literal-, a 5min de la parada de autobús (aquí no hay tantas paradas; hay dos estaciones principales y poco más) y a unos 40min andando de la uni.


Tiene un primer piso con la cocina, los baños, un "salón" (un sofá en 6m cuadrados) y varias habitaciones, y un segundo piso abuhardillado con 3 habitaciones y un baño/cuarto de lavadora-secadora. La cocina es espaciosa y el principal punto de encuentro de la FamiliaVon. Somos 10: Christa (austriaca), Linnéa, Jonas y Kevan (suecos), Jan (alemán), Julie (Francesa, de la Provence), Javi y Roberto (Burgos), Juan (Albacete?) y yo. Una mezcla estupenda. Por lo general tranquilitos (menos Kevan, que es el + fiestero y revoltoso; pero domable), ordenados y con sentido común.


El domingo tuvimos reunión y nos repartimos nevera, armarios y turnos de limpieza. Tres equipos de 3/4 personas. Domingo día de limpieza, aunque hasta la fecha, todos colaboramos un poquico para que no se acumule la mierda. Veremos cómo evoluciona la cosa, aunque pinta bien.


No hay moqueta en el suelo (es de madera), así que genial. Los baños, bueno, podrían ser mejor, pero también peor. Apañados.


Mi habitación da a la parte trasera de la casa, de modo que es de las más silenciosas, porque la cocina pilla "lejos" y no da a la calle principal (bastante ruidosa porque pasan coches constantemente y, al parecer, aquí, lo de llevar la música a tope y la ventanilla abierta, es muy común). Es espaciosa, aunque la cama ocupa casi todo. El armario, grande. La mesa, apañada. Y un silloncico, que nunca viene mal. Vamos a ir a Ikea para comprar alguna cosilla que haga todo un poco más "cosy". Soy la envidia de la casa (y de los visitantes).

 

Creo que nuestra casa va a ser el principal punto de encuentro. De momento, el sábado pasado acabaron viniendo como 30 personas. Un poco demasiado, porque tampoco es tran grande... El domingo decidimos que "Von, closes at Vone". Vamos, que el chiringo se cierra a la 1, y todos a la calle. También decidimos hacer una "Von Dinner" por semana; tiene que haber buena comunicación en la familia, de modo que, al menos una vez por semana, cenamos juntos.



Ayer fue la primera; me tocó cocinar a mí. Tortilla de patatas (of course), pan tumaca, jamón serrano, ensalada, tomate con mozzarella, quesadillas.. y un poco de vino tinto (1.299kr). Estuvo bien. Sobre las 10.30 fuimos a Hvita Perlan, el pub donde, creo, van a ser todas las fiestas Erasmus. Nos hacen descuento por ser Erasmus. Cervezas a 450kr; chupitos creo que también... No sé, principalmente, pintas a 450kr. Eso sí, el chiringo cierra a la 1-1yalgo. De ahí callejeamos, unos comieron pizza, otros intentaron buscar algo abierto... fuimos a Thor (otra de las resis) y estaba aquello que no cabía ni un alma, de modo que me vine a casa a dormir.



Por lo demás, la semana empezó a tope con trabajos, presentaciones, sentencias interminables en perfecto inglés... Pero conseguimos superar los obstáculos. El viernes pasado fue la primera fiesta Erasmus (en Hvita Perlan, también); la cosa, como bien podréis imaginar, ya se empezó a despendolar. Y ayer, ni te cuento. El personal está fatal. O muy necesitado. O carente de cariño. O qué se yo. Pero, vaya despiporre.


En cuanto a nuevos descubrimientos sobre los islandeses: empujan, rompen vasos y repiten las canciones durante toda la noche. Aunque todo se resume a una misma razón: beben demasiado. Pierden cualquier tipo de compostura que pudiesen tener. Qué barbaridad.

En fin, que mañana ya es viernes. Inga, la chica islandesa, nos ha invitado a su casa porque va a hacer sushi. Aunque no sé si iré o me quedaré por aquí con Hannah, Danny, etc. We'll see. El domingo he quedado con mi grupo de Derecho Comunitario para preparar otro trabajo. Así que aprovecharé mañana para salir. A ver si el sábado estoy con fuerzas y os hago una crónica detallada de "una noche en Reykjavik".



Os mando un beso enorme a todos. Os quiero.

Ali.